Este fin de semana hemos leído un artículo escrito por Montse Mateos para Expansión con el que estamos francamente de acuerdo, tanto que no nos podemos resistir a compartirlo.
La tecnología, la convivencia de cinco generaciones en la misma empresa y la incorporación de un talento cada vez más diverso están cambiando nuestro trabajo.
“Nada volverá a ser lo mismo” sostiene Montse. Los lugares de trabajo cruzados, la robótica y un entorno laboral en el que manda la agilidad en los procesos son algunos de los retos de los profesionales.
No podemos negar que las nuevas tecnologías han creado un nuevo entorno en el que la velocidad, la creatividad y la agilidad mandan y no nos queda más remedio que adaptarnos a ellas. La llamada revolución industrial 4.0 implica, de este modo, la convergencia de la tecnología física y digital, lo cual supone un cambio en nuestra forma de trabajar. Además, en las organizaciones llegan a confluir cinco generaciones distintas que trabajan, se relacionan y piensan de manera diferente. ¿Cómo podemos sacar el máximo partido a esta diversidad?
2017 Global Workplace Trends, una investigación que se ha completado con 55 horas de entrevistas, revela las 10 tendencias que marcarán el ritmo de trabajo y cambiarán nuestra vida laboral.
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10 tendencias que cambiarán tu manera de trabajar:
1. Agilidad
Se hace necesario delegar y compartir responsabilidades. Cuestionar y debatir es la clave para que los empleados puedan gestionar este ritmo y son las organizaciones las que tienen que impulsar esta transformación. Antiguamente las empresas eran independientes, de ahí pasaron a desarrollar redes colaborativas con socios y proveedores, y a contar con profesionales multidisciplinares capaces de trabajar con colegas ubicados en otros puntos del planeta. Ahora ya se habla de la compañía celular: un organismo vivo integrado por células autónomas con espíritu de colaboración y en amistosa competencia, que une sus fuerzas cuando es necesario.
Los profesionales saben que tienen que ser ágiles en su trabajo y estar preparados para reaccionar ante imprevistos.
2. Colaboración
Este afán por sacar el máximo partido de los profesionales se refleja en el diseño de las oficinas, en las que se comparte espacio y recursos y se favorecen las interacciones para la resolución de problemas combinando puntos fuertes para abordar cuestiones complejas. Es lo que los expertos definen como lugares de trabajo cruzados que fomentan la creatividad y la innovación.
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En estos espacios de trabajo cruzados coinciden disciplinas, habilidades, distintas generaciones y el background de cada empleado, un puzzle del que surge la innovación que requiere el mercado y que las organizaciones pueden fomentar a través de la escucha, la curiosidad, el pensamiento lateral y la creencia de que cualquiera puede innovar.
3. “Design thinking”
Se trata de poner al empleado en el centro de todo; utilizar una metodología de trabajo, utilizando la tecnología y las posibilidades de trabajar en un entorno virtual, dirigida a fomentar la innovación de una forma eficaz y con éxito.
El futuro pasa por crear espacios de trabajo más funcionales que permitan que las personas trabajen y se sientan mejor. De hecho, los expertos aseguran que con la mejora del ambiente laboral, se aumenta la productividad del empleado. Debemos empeñarnos en crear un ambiente en el que el diseño del interior –facility management– esté alineado con políticas de recursos humanos que impacten en la plantilla.
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4. Sin fronteras
La diversidad está generando nuevas oportunidades para demostrar un liderazgo inclusivo que evalúe las habilidades, la disponibilidad, los beneficios de la localización y, sobre todo, la integración cultural efectiva.
Todo este movimiento tiene implicaciones claras en el lugar de trabajo; solo las empresas que se esfuercen en promover el sentido de pertenencia y una cultura de inclusión entre trabajadores de distintas procedencias y ubicados en cualquier parte del mundo estarán mejor equipadas para hacer frente a la escasez de talento.
5. Robótica
Los avances en la robótica han hecho que, cada vez más, los robots sean capaces de realizar trabajos que solíamos hacer los humanos. El desafío al que se enfrentan las organizaciones es explorar este éxito, ya que lo que se impone es una convivencia entre máquinas y humanos; los robots nos harán la vida más sencilla y productiva.
6. Generaciones
Aprovechar la conexión de generaciones es la principal fuente de talento y creatividad. Uno de los peligros que amenaza a los lugares de trabajo es etiquetar a los profesionales por la edad: aprender de profesionales más jóvenes y mayores que nosotros es una fuente de formación única.
[Tweet ” Aprovechar la conexión de generaciones es la principal fuente de #talento y #creatividad”]
Las empresas tienen que ser conscientes de este cambio y organizar actividades que promuevan la conexión entre generaciones, intercambiar ideas, capacidades y, todos juntos, mejorar sus habilidades.
7. Bienestar
La empresa se concibe como un catalizador de una vida saludable para los empleados, sus familias y la comunidad. Los profesionales demandan esta propuesta de valor y buscan un lugar de trabajo que mejore su calidad de vida y no sea una fuente de estrés.
8. “Personal branding”
Los empleadores no solo son conscientes de la fuerza que puede tener su marca para atraer y fidelizar talento, también se han dado cuenta de que sus mensajes se comparten 24 veces más cuando lo hacen sus empleados.
La marca personal es una de las habilidades laborales del futuro; las redes sociales han puesto en bandeja una popularidad que, eso sí, requiere ser gestionada.
9. Desarrollo sostenible
Una nueva generación de profesionales y consumidores está exigiendo a las empresas que colaboren en acciones de desarrollo sostenible. Los empleados están comprometidos con ciertos valores como la igualdad de género, las energías limpias, reducir las desigualdades, etc. y piden a sus empresas que contribuyan a la mejora del mundo.
10. Talento “Millennial”
La colaboración y la creatividad son solo un par de los atributos que convierten a la generación Millennial en una de las más admiradas por las organizaciones. Entender mejor a los nacidos entre 1980 y 1995 aporta una visión más que aproximada de lo que nos depara el futuro.
Esta generación anhela experiencias y un significado en lo que hace, además de valorar las relaciones personales por encima de todo. Les motiva cambiar y formarse en diferentes compañías, necesitan transparencia en la comunicación y acceso a la información. La flexibilidad laboral es una de sus demandas y se caracterizan por su capacidad emprendedora e iniciativa.
